JARABE Y JALEA DE CUCHI
Myracrodruon urundeuva (urunde'y mi, urundeimí, urunday, cuchi, urudey, aroeira, urundeúva, urindeúva,arindeúva) es una especie botánica de árbol maderable, con frecuencia usado para apicultura. Es nativa de Argentina, Brasil, Bolivia, Paraguay, y típica de la vegetación Caatinga, Cerrado, Pantanal, en Brasil.
Su madera es sumamente dura, llamada en inglés ironwood, “palo fierro”, es comúnmente usada para hacer postes de luz, ya que su madera nunca se pudre.
En Bolivia, aunque existe este árbol en toda la amazonía, su presencia es más común en bosques subhúmedos como el chaco. En esta región, la palabra cuchi tomó relevancia cultural, aparte de por el árbol, por el violinista Omar Valdivieso Segovia, a quien el compositor Yalo Cuellar compuso una canción dedicada a él llamada “el violín del cuchi”
Preparación tradicional:
Las medicinas elaboradas del árbol del cuchi se preparan a partir de su corteza. Esta es removida, posteriormente es golpeada con palos para ablandarla y facilitar que suelte sus sustancias. Después es puesta a cocer con agua. El líquido rojo que sale, se le llama jarabe de chuchi.
Usos tradicionales:
1. El jarabe de cuchi es utilizada en su mayoría para aliviar dolores y sanar fracturas, torceduras, golpeaduras y lesiones similares. Se toma todos los días, durante un mes. Este tratamiento se complementa aplicando la jalea de cuchi.
2. Se sabe que tomar jarabe de cuchi sirve para fortalecer el cuerpo, no es necesario haber sufrido alguna torcedura, tomar el jarabe de cuchi ayudará a mejorar el rendimiento general del cuerpo.
Usos modernos:
Conociendo las propiedades descubiertas recientemente, y sumando estos conocimientos a los conocimientos nativos tradicionales, se abre una amplia gama de aplicaciones para el cuchi.
1. La Jalea de cuchi es utilizada en su mayoría para aliviar dolores y sanar fracturas, torceduras, golpeaduras y lesiones similares. Se aplica sobre el área lastimada todos los días, hasta que seque. Este tratamiento se complementa con tomar el jarabe de cuchi.
2. Otro uso menos común es para aliviar afecciones ginecológicas en las mujeres. A las heridas e infecciones vaginales se les coloca la jalea.
4. Su propiedad de neuroprotector promete aplicaciones para enfermedades degenerativas del sistema nervioso como el Alzheimer. Esta misma propiedad promete mejorar el funcionamiento nervioso sin tener que sufrir una enfermedad como estas, quiere decir que tomar jarabe de cuchi puede mejorar significativamente el funcionamiento nervioso.
5. Las propiedades antiulcerosas probadas científicamente refuerzan los usos tradicionales para tratar afecciones ginecológicas (para la jalea de cuchi). Esta misma propiedad promete ayudar en afecciones muy comunes el día de hoy como la gastritis.
6. Las propiedades antiinflamatorias son las que le dan el uso tradicional para aliviar golpeaduras y fracturas. La comunidad Candelaria Madidi Ecológico actualmente estudia los efectos que pueda tener este tratamiento y en especial esta propiedad para sanar afecciones como inflamación del útero, osteoartritis, y otras. Tradicionalmente se sabe que tomando el jarabe de cuchi, este “se va a donde está el mal”. Pacientes en tratamiento de cuchi han corroborado la sensación de que el medicamento viaja a donde se tienen afecciones (posibles inflamaciones) y actúa localmente. Los reportes de pacientes atendidos con esta medicina indican una notable disminución de dolor en lugares donde se sufrió traumatismos, una ampliación o recuperación del rango de movimiento de articulaciones, y una recuperación de la confianza para reutilizar las extremidades afectadas.
7. Todas estas propiedades sumadas a su propiedad antioxidante hacen del cuchi una medicina –y suplemento alimenticio- bueno para ayudar a mejorar en prácticamente todos los padecimientos que existen, y para mejorar en general el estado de salud de las personas, aunque no presenten síntomas de un padecimiento en específico.