El que dio origen a todas las formas de colonialismo.
Como bien sabemos, existen diferentes planos de consciencia, de existencia y de -ser humano- como son el plano físico, emocional, mental y espiritual. Somos seres espirituales teniendo una experiencia física.
Quizá nos han alejado de la espiritualidad, la han devaluado, la han convertido en religión, y la educación cientificista se ha esmerado en reducir la espiritualidad a una expresión humana válida, pero que no existe: el plano espiritual, no hay una dimensión espiritual.
¿Qué es espiritual? Otra forma de llamarle que facilita su comprensión, es la dimensión mágica-espiritual. Mágica porque este plano, esta dimensión, no está limitada a las leyes de la física, ni de la lógica y coherencia mental.
Es de este plano, de esta dimensión, de donde proviene todo lo que existe. Es la dimensión del origen y del destino. Nuestra existencia, y la existencia de los demás planos, del cosmos materia-espacio tiempo-espacio, es una experiencia temporal, que experimenta el gran ser espiritual, la realidad mágica-espiritual.
Hace miles de años, los seres humanos vivían inmersos en una realidad en la que no se había definido completamente aún la dimensión física. La materia está íntimamente relacionada con la consciencia. En el presente, la ciencia al buscar definir y medir las leyes, causas y efectos de la física, CREA las leyes, las define, las refuerza. De esta manera, la realidad de la materia se aleja de su origen espiritual y se va creando, materializando, cristalizando y endureciendo, la realidad física.
La dimensión espiritual no cesa de existir, aunque la ignoremos. La realidad física material es parte de la realidad espiritual, aquello que sucede en la realidad material, como el endurecimiento y la cristalización, lo acoge la realidad espiritual como parte de su propia experiencia y creación.
La dimensión espiritual es más abstracta y flexible que las dimensiones mentales, emocionales y materiales, pero no es completamente incoherente y abstracta, si así lo fuera, sería un mar primordial de la no existencia. La existencia es forma, la dimensión espiritual tiene intento, pensamiento, acción y consciencia.
El gran ser busca la expansión, y en esta búsqueda se abre a nuevas experiencias. Una de estas experiencias es la destrucción, la muerte, el sufrimiento, el mal. En esta búsqueda, es que permitió, que en ciertos planos de su creación, como los planos espirituales, mentales y físicos que recorremos los seres que vivimos en esta tierra tiempo-espacio, se creara y manifestara el mal. Así, se manifestó el colonialismo espiritual.
La esencia humana y los seres vivos del planeta tenemos cierta forma energética, de luz. Es una forma brillante, que irradia luz. En cierto momento, al permitirse la expansión de la experiencia en el universo, este planeta fue colonizado por esencias e identidades más oscuras. Seres que eran desconocidos, extraños, ajenos, y más oscuros que los seres de luz que en este planeta habitaban.
Los humanos tienen y tenían el control sobre la creación y sobre el rumbo de la evolución. Son seres réplica del gran ser, y como este gran ser, podemos decidir por él, somos el, que en este plano, elegimos que hacemos y adonde vamos.
Hace miles de años, los seres humanos descubrieron a estos seres oscuros en algún lugar del cosmos espiritual. Comenzaron a comunicarse con ellos, y estos seres les pusieron una trampa. A cambio de algo que era desconocido -poder-, los seres humanos, tal vez sin saberlo, les permitieron tener entrada al planeta, al tiempo, y así fueron tomando poco a poco el control del destino de la humanidad y del planeta.
Comenzó el colonialismo espiritual. Estos seres comenzaron a infiltrarse en las esencias, los rezos, las palabras, el mundo mágico-espiritual que tenían nuestros antepasados. Aquello que era una esencia muy de luz, muy espiritual, comenzó a endurecerse, a cristalizarse, a hacerse material y a hacerse más oscuro. Las oscuras intenciones comenzaron a aparecer. La evolución, el crecimiento, que llevaba la humanidad, se vio intervenida, como un virus que afecta el crecimiento. Este virus permitió que continuara únicamente la evolución de las cosas más densas y materiales. Permitió que se crearan y evolucionaran las máquinas, y nada más.
El plano espiritual no era suficiente, los seres oscuros hicieron lo necesario para materializare físicamente. Crearon demonios físicos y violaron a las mujeres. Se esparció la enfermedad, la degeneración genética. Crearon las enfermedades, las pestes, para infectar a la raza humana, para mermar y degenerar su crecimiento y conexión con lo divino.
Teniendo presencia física, seres humanos que los siguieran ciegamente, crearon las religiones. Después las instituciones religiosas, políticas, sociales. Crearon una matrix espiritual, física y mental, que despues evolucionó a ser económica y militar, en donde en tan solo 1000 años lograran tener al 99% de la población humana atrapada en ella, y alimentando energéticamente a estos seres oscuros.
Los seres humanos son los seres que más energía les proveen. Otros seres vivos, al no tener la energía, el poder creador, la luz que tienen los humanos, no son de interés para estos seres oscuros. Es su plan llevar a las especies a la extinción, y hacer poblar la tierra lo más posible para tener la mayor cantidad posible de seres que los alimentan.
El control de estos seres se ejerce en todos los planos y de todas las formas posibles e imaginables. Sin embargo, el gran ser, la gran consciencia, y el 1% de los humanos que no han caído atrapados en esta red, han podido continuar con el plan divino, el plan original, el plan descolonizado, y llevar a la humanidad al despertar de una nueva era, desencadenando poco a poco el despertar físico, mental y espiritual de los demás seres humanos.
La desconexión física total ahora es muy difícil, ya que para ello se requiere ser libre, independiente, autónomo 100% de las estructuras materiales y físicas de la civilización moderna, que es la civilización creada por estos seres. La única manera de ser libre es poder vivir autónomamente lejos de las ciudades, de la luz eléctrica, de los alimentos, productos y demás creaciones físicas del mundo moderno.
Sin embargo, la desconexión física, espiritual y mental ocurre poco a poco en muchos seres humanos y en muchos lugares. Personas están despertando, están tomando consciencia de esto, y están descolonizando sus seres física, mental y espiritualmente, poco a poco.
Descolonización Espiritual
La descolonización física y mental es importante y ocurre por decisión. La descolonización física requiere mucho sacrificio, esfuerzo. La descolonización espiritual en muchos es natural, el rechazo a las religiones, a las estructuras espirituales creadas. Todo esto es posible y ocurre a nivel individual, en cada uno de los que están despertando.
Pero también es necesario la descolonización colectiva. La descolonización es un tipo de guerra. Una guerra que puede ser ganada sin el uso de violencia y de las armas, pero no menos una guerra. La guerra espiritual está allí, los seres oscuros constantemente invaden las almas, crean falsos profetas, falsos guías espirituales, falsas esperanzas espirituales, falsos mensajes espirituales. Incluso las personas avanzadas en el proceso de despertar, pueden estar replicando estos falsos mensajes y estas falsas esperanzas, caer en estas distracciones. Sucede todo el tiempo.
Una distracción muy común es caer en una aparente "descolonización espiritual", que puede ser visto como un crecimiento o acercamiento espiritual, en el cual se desvalora y se olvida la parte física. En el 2012 se esperaban muchas cosas que no sucedieron. Se creía que meditaciones colectivas bastarían para cambiar de posición la balanza y lograr el equilibrio y el fin de la era oscura. La luz y la consciencia se han expandido, pero la matrix sigue allí y mas que nunca amenaza con eliminar el poco de belleza y libertad que queda en la tierra.
Conscientes de esto, se pueden reunir las personas y las acciones que encaren esta guerra espiritual. Esta guerra espiritual debe ser holísitica, integral, debe realizarse conjuntamente con lo físico y mental, con lo individual y lo colectivo.
La Descolonización Espiritual debe ser integrada con todas las demás actividades de descolonización para lograr una efectiva emancipación social.
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