¿Por qué Ixiameña?
Porque me lo contó una vecina de aquél poblado que se proclama capital de la
Amazonía paceña. De relatos de serpientes, la más bella, es aquella historia
que Yoli me contó.
Yoli era mi vecina,
que vive al frente, del otro lado del canchón. El canchón es parte de la casa
en donde llegué a alquilar un cuarto, que ocupaba para hospedarme durante mi
estadía de varios meses en Ixiamas. Fueron varios meses que tardé en entablar
una conversación con ella, su existencia se limitaba en verla salir y entrar de
su pequeña casa de madera, propiedad de un familiar suyo, acompañada por niñas,
niños, jóvenes y señoras.
Fue cuando me enferme
levemente del estómago, que tuve la necesidad de acercarme y pedir que me hagan
hervir agua para preparar un remedio. El pedido, aunque fue atendido, dio curso
a una conversación.
–"¿y a usted que
le trae por aquí?" Me preguntó Yoli
–"estoy haciendo
varios proyectos, relacionados al turismo y a la cultura tacana, pero es un
proceso muy difícil" contesté yo
–"Ah, turismo. Si
aquí debe ser difícil hacer turismo. Y qué, ¿está enfermo?" Preguntó
nuevamente
–"sí, llevo
varios días con diarrea y me está molestando el estómago" le contesté.
–"debe tomarse un
cloranfenicol, hágame caso sí, le
va a hacer bien" Recetó la vecina sin
más, lo que facilitó la transición de un interrogatorio común a un debate sobre la medicina y la salud, que
duró varios días hasta que aparentemente triunfara la versión más natural que
defendía yo.
Así comenzó una amistad basada en cortas y
esporádicas conversaciones que fueron encontrando el interés común en la
ancestralidad, o lo que ella llama "lo que dicen los antiguos".
–"a mí siempre me
ha gustado escuchar las historias de los más antiguos, no ve, los que están ya
grandes y son bien poquitos" – y así comenzaba su relato –"mi tía nos
contaba que escuchaba unos ruidos cuando subía al cerro de Rurrenabaque, ¿lo
conoce? ¿El que tiene una virgen encima?
Preguntaba Yoli intentando ubicarme dentro de la historia.
– "Ah, sí, lo he visto,
yo iba a correr por allí" le contaba yo, después ella continuaba.
–"bueno pues allí
dice mi tía que cuando ella vivía en Rurrenabaque y subía a ese cerro a ponerle
una vela a la virgen, escuchaba los ruidos de niños y gallinas así allí. Y es
que dice que antes, debajo de lo que ahora es el río Beni, había una ciudad
grande, donde todo era de oro, y que esa ciudad grande se inundó con el río,
cuando el río salió de la montaña".
Rurrenabaque, es ahora
un poblado que hace de pequeño puerto sobre el rio Beni, justo donde éste sale cortando un cañón a
través de la última estribación Andina, juntándose con la eterna planicie
amazónica.
–"Ah sí, yo he
subido harto a ese cerro, iba a correr por las tardes, y allá arriba se escucha
los ruidos de las gallinas y de la gente que está abajo" interrumpía yo,
insinuando que se trata de un fenómeno natural pero extraño, ya que los cerros
son altos y no pareciera posible que se escuchen los sonidos del poblado tan
cercanamente. Luego, Yoli corregía.
–"Pero no, hay
veces que se escucha así, los sonidos del poblado aquel y sus llantos de cuando
se ha inundado porque ha crecido el río. Y es que todo eso es una gran
serpiente dice la gente mayor, así me decía mi tía, que es una serpiente
gigante que tiene su cabeza allá en Copacabana, en el lago. ¿Usted
Conoce?" Preguntó.
–"Conozco, he
estado allí". Le contesté. Yoli continuaba
–"pues sí, dice
mi tía que allí está la cabeza de la serpiente, y que su cuerpo es tan grande
que llega hasta acá, que está toda debajo de nosotros. Su cabeza dice está
congelada, detenida por la virgen de Copacabana, que está en su boca y que
ella, la virgen, la mantiene así, quieta. ¿Usted conoce, la historia de la
virgen de aquel lugar?" Me preguntó. Yo le conté lo que sabía, la historia
más conocida de la virgen que sale del lago y la reseña histórica de las dos
vírgenes más antiguas de américa, que son la de Copacabana en Bolivia y la de
Guadalupe en México.
–"bueno pues ve como dicen que la virgen
ha salido del lago, y luego la han llevado a ese altar, pues eso es por algo,
es para aquietar a la serpiente que allí tiene su cabeza. Si quitan a la virgen
de allí, entonces esa serpiente se va despertar y se va a sacudir y va a hacer
temblar por todo lado, hasta acá llega esa serpiente, está debajo de todo. Si
ella se mueve, todo se va a sacudir, todo va a cambiar la tierra, porque ella
es todo lo que está por debajo. Es como la historia del apocalipsis".
Así finalizaba su
historia Yoli, y me dejó pensando, cautivado, ¿Qué pasaría si quitamos esa
virgen de allí? ¿Despertará la serpiente?
Que linda historia!!! deberíamos intentar que se despierte la serpiente, haber si sacude la Amazonía y nos salva de tanta mega infraestructura en la hermosa selva.
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